domingo, 26 de diciembre de 2010

Resumen 2010

Ha sido un excelente año 2010 aquí en Desde Mi iPod
La sola creación de un blog dedicado por entero a la música fue un paso que quise dar desde hace bastante tiempo. Ya materializado, estoy complacido con los resultados que ha logrado: Sus primeras 50 entradas y las más de 6000 visitas que ha recibido (más de 3400 visitantes desde 65 países distintos). Agradezco profundamente a todas las personas que con un click han llegado a esta plaza, especialmente a quienes han dejado sus comentarios.

A continuación un listado de las 50 entradas publicadas durante el 2010, en orden cronológico:
Para el 2011 el compromiso es continuar la labor iniciada durante este año y seguir publicando, siempre sobre música y sobre músicos, siempre sobre una variedad de géneros y latitudes; siempre de manera independiente; y siempre sobre la música que suena Desde Mi iPod.

¡Gracias!

sábado, 18 de diciembre de 2010

Ludwig van Beethoven: Sinfonía N° 6 (Pastoral)

Mi apreciación:
Perfección.
La representación sinfónica de lo sublime.

En esta entrada:


Sinfonía N° 6 en fa mayor (Pastoral):
La Sinfonía n.º 6 en fa mayor, Opus 68 "Pastoral" fue terminada por Ludwig van Beethoven en 1808. Es una de las pocas obras de música programática de Beethoven, y el compositor la subtituló Recuerdos de la vida campestre.

Beethoven fue un amante de la Naturaleza, tanto así que pasaba gran parte de su tiempo caminando por el campo. Frecuentemente abandonaba Viena para trabajar en localidades rurales. No fue, sin embargo, el primer compositor en describir sinfónicamente la Naturaleza: por ejemplo, en su oratorio Las Estaciones, estrenado en 1802, Franz Joseph Haydn similarmente pintó el amor por la Naturaleza, campesinos bailando, una tormenta, pájaros cantando, y otros similares.

Anteriormente, durante el Barroco francés e italiano, se compusieron piezas que pretendían imitar a la Naturaleza, aspiración muy propia de la Ilustración. El veneciano Antonio Vivaldi había compuesto sus celebérrimos Conciertos para violín Opus 8, Las cuatro estaciones, genial pintura de la naturaleza, con tormentas, cantos de aves, moscardones, etc.

Beethoven optó por componer una sinfonía, y así escapó del carácter sobre-literal que un libreto -en el caso de componer una cantata o un oratorio- hubiese impuesto. Como dijo el compositor, la Sexta Sinfonía es «más expresión de sentimientos que pintura de sonidos», y el mismo punto se ofrece en el título que colocó en el primer movimiento.

La Sexta Sinfonía fue compuesta simultáneamente con la más famosa de Beethoven —y la más potente— Quinta Sinfonía. Fue estrenada junto a ésta en un exageradamente largo concierto en el Theater an der Wien de Viena, el 22 de diciembre de 1808. Fue recibida fríamente, sobre todo debido a su más brillante contraparte, la Quinta. Si bien la Sexta contiene algunos de los pasajes más hermosos del músico de Bonn, la gente deseaba otra obra cargada y aventurera, y la obra relativamente calmada e introspectiva no fue muy de su agrado.

A pesar de su estreno poco auspicioso, la obra se ha convertido poco a poco en una de las obras centrales del repertorio sinfónico. Es la favorita de muchos oyentes y es muy frecuentemente interpretada y grabada en la actualidad.

La obra dura alrededor de 40 minutos. Rompió con el molde clásico al tener cinco movimientos, en lugar de los cuatro típicos. Los movimientos son:
  • Erwachen heiterer Empfindungen bei der Ankunft auf dem Lande («Despertar de alegres sentimientos con la llegada al campo»): Allegro ma non troppo.
  • Szene am Bach («Escena junto al arroyo»): Andante molto mosso.
  • Lustiges Zusammensein der Landleute («Alegre reunión de campesinos»): Allegro.
  • Gewitter. Sturm («Relámpagos. Tormenta»): Allegro.
  • Hirtengesang. Frohe und dankbare Gefühle nach dem Sturm («Himno de los pastores. Alegría y sentimientos de agradecimiento después de la tormenta»): Allegretto.


Beethoven adapta su programa descriptivo a la forma sinfónica clásica habitual, insertando después del scherzo (III movimiento) un movimiento adicional (Tormenta), que preludia el final. En el final del andante (escena junto al arroyo), la flauta, el oboe y el clarinete se aúnan armoniosamente en la imitación de los cantos del ruiseñor, la codorniz y el cuclillo (compases 129 a 136 del Andante molto mosso). El propio compositor advierte que estas descripciones no deben tomarse de una manera demasiado literal, él las clasifica de expresión de sentimiento, antes que de descripción.

Sólamente el primer movimiento se acomoda a la forma sonata. El tercer movimiento responde a la forma Scherzo- Trío, modificada. Esta sección se enlaza sin pausa con los dos últimos movimientos, práctica que Beethoven solamente empleó en esta obra y en la Quinta Sinfonía. Felix Mendelssohn (Sinfonía de la Reforma) y Robert Schumann (Cuarta Sinfonía) retomaron este procedimiento décadas después.

La plantilla instrumental de la sinfonía difiere en cada movimiento y aporta escasas modificaciones a las previas obras sinfónicas del maestro alemán. Para los movimientos más líricos (el primero, el segundo y el final), Beethoven especificó una orquesta sinfónica clásica más bien pequeña: 2 flautas, 2 oboes, 2 clarinetes, 2 fagots, 2 cornos, y una orquesta de cuerdas consistente en los usuales primeros y segundos violines, violas, cellos y contrabajos. Para el tercer movimiento, a ellos se suman 2 trompetas, y para incrementar el efectividad de la tormenta, Beethoven agrega trompetas, 2 trombones, timbales y un flautín (piccolo).

La Sexta significó un paso más en el desarrollo de la música programática, que desembocaría por último en la aparición del poema sinfónico por Franz Liszt. Este proceso culminaría a finales del siglo XIX en los extraordinarios poemas sinfónicos de Richard Strauss y en sus sinfonías programáticas, especialmente en la estruendosa y lírica a la vez Sinfonía Alpina.


domingo, 12 de diciembre de 2010

Joy Division

Mi apreciación:
El legado de Ian Curtis: Existencialismo musical. La banda sonora de la angustia.

En esta entrada:


Bio:
Joy Division fue una banda de post-punk inglesa, formada en 1976 en Salford, Greater Manchester. Originalmente llamada Warsaw, la banda estuvo formada por Ian Curtis (voz y en ocasiones guitarra), Bernard Sumner (guitarra y teclados), Peter Hook (bajo y coros) y Stephen Morris (batería y percusión).

Joy Division rápidamente evolucionó de sus influencias punk rock iniciales, (de acuerdo con el crítico musical Jon Savage "no era punk pero estaba directamente inspirada por su energía") para posteriormente desarrollar un sonido y un estilo que fue pionero del movimiento post-punk, del dark y el rock gótico pues no solo poseían un sonido siniestro; sino que sus letras estaban obsesionadas con la desesperación y la muerte, productos de la epilepsia que padecía su vocalista Ian Curtis.

Su EP debut, An Ideal for Living, atrajo la atención de Tony Wilson, una personalidad de la televisión de Manchester. El álbum debut de Joy Division, Unknown Pleasures, fue lanzado en sello discográfico de Wilson, Factory Records, y provocó la aclamación de la crítica británica. A pesar del creciente éxito de la banda, el vocalista Ian Curtis fue afectado por la depresión y por problemas personales, incluyendo la disolución de su matrimonio y sus agudas crisis de epilepsia. Curtis encontraba cada vez más difícil presentarse en vivo, y a menudo tenía convulsiones durante sus espectáculos.

En mayo de 1980, en la víspera de la primera gira de la banda en Estados Unidos, Ian Curtis abrumado por su depresión, se suicidó ahorcándose en su cocina. Joy Division lanzó póstumamente su segundo álbum, Closer (1980), y el sencillo "Love Will Tear Us Apart" se convirtió en su lanzamiento más exitoso en los rankings. Después de la muerte de Curtis, los miembros restantes de la banda formaron New Order.

A Joy Division les tomó tiempo desarrollar su propio sonido.Como Warsaw, la banda practicaba una "forma inclasificable de hard rock con toques punk". El crítico Simon Reynolds aseguraba que "la originalidad de Joy Division se ponía de manifiesto cuando las canciones se volvían más lentas". La música del grupo adoptó un tono "desparramado"; según Reynolds "el bajo de Peter Hook llevaba la melodía, la guitarra de Bernard Sumner rellenaba los huecos del sonido a base de densos riffs y la batería de Stephen Morris parecía rodear el borde de un cráter". Sumner describió el sonido característico de la banda en 1994: "Salió de forma natural, yo más con el ritmo y Hooky más con la melodía. Él solía tocar fuerte el bajo porque a mi me gustaba el sonido distorsionado de la guitarra, y el amplificador que yo tenía sólo funcionaba con el volumen a tope. Cuando Hooky tocaba suave no podía oírse a sí mismo. Steve tiene su propio estilo de tocar, es diferente a otros baterías". Con el tiempo, Ian Curtis empezó a cantar con voz suave de barítono, a menudo comparable a la de Jim Morrison de The Doors, una de las bandas preferidas de Curtis.

Sumner ejercía como jefe musical no oficial de la banda, como después en New Order. Mientras que Sumner era el guitarrista principal, Curtis sólo tocó la guitarra en unas pocas grabaciones y conciertos. Curtis odiaba tocarla, pero los otros insistían en que lo hiciera. Sumner dijo:"tocaba de una forma estrambótica pero era lo que nos gustaba, porque nadie más que Ian tocaba de aquella manera". Durante la grabación de Closer , Sumner empezó a utilizar sintetizadores hechos por él mismo y Hook usaba un bajo de seis cuerdas para reforzar la melodía.

El productor Martin Hannett se "dedicó a capturar e intensificar el halo tétrico de Joy Division". Hannett creía que el punk rock era sonoramente conservador por su rechazo a utilizar tecnologías de estudio para crear espacio sonoro. El productor se propuso crear un sonido más desarrollado para los discos del grupo. Hannett decía: "(Joy Division) Eran un regalo para un productor, porque no seguían directrices, ni argumentos". Hannett separó y limpió desde su mesa los sonidos de los diferentes instrumentos, incluso las distintas partes de la batería de Morris.

A pesar de su corta carrera y su estatus de "grupo de culto", Joy Division han ejercido una influencia de largo alcance. John Bush de Allmusic dice que Joy Division "se convirtieron en la primera banda del movimiento post-punk en enfatizar no la cólera y la energía, sino el estado de ánimo y la palabra, dando pie al advenimiento de la melancólica música alternativa de los 80".

La evolución musical de Joy Division durante los pocos años que duró la banda, aunque paralela a la de otros grupos contemporáneos (The Fall, Magazine, etc.) es clave para entender lo que sucedería durante los años ochenta. Pasaron del punk al post-punk y, ya en Closer a un proto-tecno que podemos reconocer luego en bandas como Depeche Mode, Human League, y otras. La segunda mitad de "Decades", el último tema de "Closer", entierra definitivamente toda relación con el punk y anticipa el sonido de New Order.

Joy Division ha influido tanto a bandas coetáneas como U2 y The Cure, como a artistas actuales: Interpol, Bloc Party y Editors. Bono, el cantante de U2 ha dejado claro que su grupo siente veneración por Joy Division. En su autobiografía de 2006, U2 by U2 cuenta que "sería difícil encontrar un lugar más oscuro en la música que el de Joy Division. Su nombre, sus letras y su cantante fueron como la nube más negra que puedas encontrar en el cielo. Percibí esa búsqueda de un Dios, ó luz, ó una razón de ser. Notas que para él la belleza era verdad y la verdad, belleza y lo suyo era buscar ambas". Artistas como Moby ó John Frusciante de Red Hot Chilli Peppers han declarado su estima por la música de Joy Division y la influencia que ha tenido en su trabajo. En 2005, Joy Division fueron incluidos junto con New Order en el UK Music Hall of Fame.

Discografía:
  • Unknown Pleasures (1979).
  • Closer (1980).